Cuando empecé a barajar la posibilidad de apuntarme a un curso de escritura creativa mi lado pragmático me llevó inicialmente a decantarme por el martes o el jueves, pues son las únicas tardes que abre mi negocio hasta las 7 y así iría de tirón.
El profesor del jueves no me caía mal ni bien, pero luego me dijo Luis, medio en broma, medio en serio que por qué no elegir mejor una profesora. Supongo que por la historia de otra conocida que se apuntó a un taller similar y acabó acostándose con el profesor.
Así que ví el perfil de Gloria, y la verdad que sí me gustó como hablaba en sus vídeos, y su trayectoria en la escuela Fuentetaja.
El primer día de clase, me resistí a hablar de mi misma en la forma tradicional. No quise mencionar si tenía hijos, ni mi estado civil, ni siquiera a qué me dedicaba y, por contra, fui anotando mentalmente, con mi memoria fotográfica los comentarios y las sensaciones que me dio cada uno de los restantes alumnos.
Salí pensando que éramos un conjunto de personas tan diferentes entre sí por edad y situación personal que podría ser tan interesante o más incluso el experimento sociológico que suponía este grupo que el aprendizaje de la escritura creativa propuesto.
Semana a semana, la cosa se ponía más interesante. Algunos compañeros desaparecieron tan rápido que no dio tiempo a recordar sus nombres. Otros nuevos fueron llegando y fue cuajándose el germen de un grupo alternativo al propio curso que prolongaba la relación fuera de las clases, tomando vinos. Luego los vinos se tomaban ya también durante la clase y desde la segunda semana se convirtió en una tradición semanal que nos fuimos turnando según onomásticas o celebraciones o simplemente porque sí.
Nuestro punto de encuentro más habitual fue este:
cuyo nombre se podría decir que define bastante bien nuestro espíritu: ESTADO PURO, aunque fuera puramente accidental que acabáramos allí porque ni el trato, ni el precio, ni las tapas, era adecuado al tiempo que pasábamos allí ni al número de comensales que solíamos ser.
Muchas han sido las horas compartidas. La mayoría dentro de clase y algunas más compartiendo ocio.
Muchas han sido las historias escritas y las contadas, forjando un círculo bien avenido y tolerante que llegando a final de curso ya había pensando continuar juntos. Pero entonces fue la propia profesora la que nos propuso repetir el siguiente año todos juntos, con ella. Y aquí estamos, enfrentando el verano intentando no perder el contacto, con los diferentes planes laborales y veraniegos que no lo ponen muy fácil.
Por eso se me ha ocurrido abrir este blog: podemos seguir compartiendo nuestras historias escritas pendientes (a mi me faltan como 6-7 por escribir) y las nuevas que nos surjan, comentarios a la infinita lista de libros recomendado por Gloria para verano o simplemente, tener un espacio similar al encuentro semanal de los miércoles.
Ahí lo dejo :)
Una genial idea Cristina. Para mí este curso ha sido de gran ayuda en general, he aprendido mucho de vuestras formas de escribir tan diferentes y tan personales como las personalidades de cada uno. A la vez, me ha ayudado ha salir de mi cruda realidad, al menos el miércoles, día que he reservado a cuidarme, a pasearme fuera de mi mapa, en un intento de escapar de mi realidad. Escribir me ha ayudado a veces, otras ha sacado cosas que no quería, pero todo me ha ayudado mucho. Ojalá hubiera habido más miércoles, se me han quedado cortos. Los hecho de menos, así que el miércoles es el día en que me siento a escribir o simplemente empezar a ordenar relatos. Ha sido una terapia fantástica, aunque al final me estaba costando mucho salir de mi concha, os agradezco enormemente la alegría queme traía a casa después de leer con un vasito de vino en la mano. Los miércoles me han ahorrado sesiones de psicólogo y me han enseñado que todo vale si me escondo tras un relato, puedo ser quien yo quiera, incluso feliz. El resto del tiempo me he entretenido buscando por librerías de segunda mano los libros de la lista de imprescindibles y, aunque no lo creáis, se me ha pasado el año volando, sin acordarme la mayoría de las veces de volver a mi tristeza. Creo que todos empezamos con un motivo en la cabeza y nos hemos encontrado otro. Hay quien buscaba una pasión, hay quien buscaba empezar un libro, hay quien lo terminó y lo publicó, hay quien vino con un estilo y encontró otro, hay quien vino buscando refugio en la escritura y encontró un mundo donde vivir otra vida soñada. Creo que escribir nos ayuda a todos. Vinimos a escribir y encontramos incluso compañeros de vinos. Gracias por prestarme vuestras sonrisas para llevármelas a casa, vosotros no lo sabéis pero cada miércoles me llevaba también un motivo para vivir.
ResponderEliminarNo sabes lo que me alegro
ResponderEliminary yo!!
EliminarPor cierto soy Pilar
ResponderEliminarEs importante conocer nuestros pseudónimos, Pilar, gracias.
ResponderEliminarMuy buena idea Cristina (lo del blog). Yo no diría que he encontrado la pasión motivadora que buscaba; también es verdad que para que yo me apasione tendría que poder tocar las estrellas sentada al lado de un tigre (felino) blanco que me mirara arrobado, cosa harto improbable.
ResponderEliminarA cambio os he encontrado a vosotros y habéis hecho del vulgar miércoles el día más interesante de la semana y, con el nuevo taller de octubre, la vuelta de vacaciones tiene un aliciente añadido. He conocido a Ernesto que no sé si lo creereis pero tiene identidad propia y me he conocido también mejor a mí misma (esto ya...)
Se ha reforzado mi creencia de que las personas un poco atormentadas son las más interesantes, sobre todo las que consiguen, a pesar de todo, ser razonablemente felices.
Muchas gracias por los días de vino y rosas (gran película que os recomiendo).
¡Qué bonito comentario, Pilar! Pasión por vosotros 😍😍
EliminarPor cierto soy Eva
ResponderEliminarQué bonito, Cristina, me gusta mucho. Vas a hacer que me emocione y todo. Sois maravillosas y maravillosos. Cuidaos mucho!!
ResponderEliminarÁngela P.
Yo soy María PS y sigo de pruebas con esto. Media hora he tardado en encontrar esta entrada y leerla, así que solo quiero comprobar que me aclaro y que esto llega! Prometo pensar algo interesante para poner en otro momento.
ResponderEliminarPor ahora, os mando besos enormes!
Maria yo he batido el récord de pelearme con el blog. No me dejaba hacer comentarios y me salían cosas un poco raras. Bueno, en cuanto a la reunión de ayer, ya veo que os juntasteis unos pocos y degustasteis sólidos y líquidos.
ResponderEliminarSaludos cordiales.
Hola. Ya estoy aquí, por fin. Acabo de leer vuestros conentarios y me considero afortunada por pertenecer a este grupo. Escribís de p. m. Voy a tener que esforzarme. Aquí en Extremadura me acoge la modorra. Bastante tengo con vigilar a la Petry que va y viene por la casa moviendo cogines y manteles de un lado a otro, segun dice ella para ordenarlo todo. Besos a todos.
ResponderEliminar